son los días que mas detesto, cuando no te siento.
¡Oh dulce lluvia me tienes enamorada!
Hay momentos que sin saberlo me
arreglo para tu encuentro,
algo dentro de mi lo intuye, como hoy.
Se encuentra
muy lacio mi cabello , tanto que a la
brisa seduce,
ondeando y ondeando me hace sentir celos.
Llevo vestido, uno ligero
y zapatos a juego, guardan mis pasos,
dictando el camino a nuestro encuentro.
De pronto apareces dejando sin
movimiento mi cabello,
mi vestido poco a poco se va ciñendo al cuerpo
y mis
zapatos denotan las marcas de nuestro fugaz encuentro.
Tímidamente paseas por
mi cuerpo
y en cuestión de segundos parece que te pertenezco,
ya cada rincón conoces. El lodo también se hace cómplice.
Y va dejando huella del camino que ahora juntas estamos
recorriendo.
Es hermosa, mi lluvia, doncella fría
y cálida a la vez,
a mi piel logra estremecer, tan cristalina, me abraza...
Me ha gustado mucho la entrada, mil besos!
ResponderEliminarNormalmente no me gusta la lluvia, casi siempre es triste y coincide en días tristes...
ResponderEliminarGRACIAS POR PASAR ME ENCANTO LO QUE ESCRIBISTE
ResponderEliminarESTABA DE VACACIONES PERO YA REGRESE! UN BESO!
Pero muy bien! que poesia tan miticamente pluvial, descriptiva y no pierde los rastros lujosos de versos que se pegan al subconsciente. "Es hermosa, mi lluvia, doncella fria y calida a la vez, a mi piel logra estremecer, tan cristalina, me abraza" en hora buena que final, Jose vas muy bien.
ResponderEliminarP.D por fin! he visto en la parte superior derecha el link para seguirte y no perderte.